Ciudad Juárez, Chihuahua.– Vivimos en una ciudad con profundas necesidades de infraestructura vial y peatonal. La movilidad es uno de los temas con mayor impacto en las vidas de las y los juarenses, pues los prolongados tiempos de traslado, la calidad de las calles y banquetas y los profundos rezagos en materia peatonal representan retos significativos de planificación urbana. En ese sentido, el informe Así Estamos Juárez 2024 plantea: “La planificación urbana debe priorizar la creación de espacios que favorezcan la movilidad peatonal y ciclista, así como el fortalecimiento del transporte público eficiente y accesible. Solo a través de acciones concertadas y una visión integral de la movilidad urbana se podrá construir una ciudad más sostenible, inclusiva y segura para sus habitantes”.
En ese sentido, los megaproyectos contemplados en el Presupuesto de Egresos 2025, como la ampliación de la avenida de las Torres ($150 millones) y un paso a desnivel ($130 millones), buscan modernizar la movilidad vehicular. Sin embargo, es imperativo analizar su impacto crítico, considerando los rezagos históricos y las carencias actuales en infraestructura peatonal.
Movilidad, rezagos históricos y contexto actual
Ciudad Juárez prioriza tradicionalmente el desarrollo vehicular por encima de las necesidades peatonales. La ciudad carece de banquetas accesibles, rampas adecuadas, cruces seguros y semáforos peatonales en puntos estratégicos, lo que incrementa la vulnerabilidad de los transeúntes. De acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), Chihuahua ocupa el segundo lugar nacional en muertes de peatones, con 95 casos reportados en 2023. Esto refleja una preocupante desatención hacia las personas que se desplazan a pie en una ciudad marcada por el uso predominante del automóvil.
Impactos esperados de los megaproyectos
Mejoras para la movilidad vehicular
La ampliación de la avenida de las Torres y el paso a desnivel aliviarán la congestión vehicular, optimizando los tiempos de traslado para conductores y facilitando la logística de transporte público. Esto podría ser un incentivo económico para las zonas circundantes, aumentando su valor comercial. Sin embargo, la falta de cruces seguros en esta vía rápida ha provocado accidentes fatales, como el del 26 de noviembre, cuando un hombre tratando de cruzar la avenida se tropezó y terminó arrollado por un conductor. De hecho, en un tramo de aproximadamente 7 kilómetros hay cruces con consideraciones peatonales en la zona frente a la Plaza Sendero las Torres y la calle Sorgo, lo que advierte del riesgo constante de cruzar esa avenida.
Persistencia de inequidades en movilidad
Aunque estos proyectos mejoran aspectos clave de la movilidad vehicular, no resuelven el rezago histórico en infraestructura peatonal. La falta de cruces seguros y espacios peatonales adecuados perpetúa las inequidades en movilidad y pone en riesgo a las personas que caminan, especialmente a poblaciones vulnerables como adultos mayores, niños y personas con discapacidad.
Falta de espacios peatonales: una necesidad de movilidad urgente
La ausencia de infraestructura peatonal en Ciudad Juárez no solo compromete la seguridad, sino que limita el ejercicio del derecho a la movilidad. Según la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, los peatones deben ocupar el primer lugar en la jerarquía de movilidad. Sin embargo, la realidad en Juárez dista mucho de este principio: banquetas inexistentes o deterioradas, ausencia de pasos peatonales pompeyanos y semáforos diseñados exclusivamente para el flujo vehicular son problemas recurrentes.
Recomendaciones para un impacto positivo
Integración de infraestructura peatonal
Es vital que los megaproyectos incluyan banquetas amplias, rampas accesibles, cruces seguros y ciclovías. Esto no solo garantizaría la seguridad de los transeúntes, sino también fomentaría formas de movilidad sostenible.
Participación ciudadana y transparencia
Involucrar a la ciudadanía y a organizaciones civiles en la planificación de estas obras asegurará que las necesidades reales de la población sean atendidas. También es crucial garantizar la transparencia en el uso de los $1,539 millones destinados a obras públicas.
Políticas de movilidad sostenible
Priorizar el transporte público y la movilidad no motorizada ayudaría a reducir la dependencia del automóvil, contribuyendo a un entorno urbano más inclusivo y menos contaminante.
Los megaproyectos de infraestructura vial representan una oportunidad para transformar Ciudad Juárez, pero también plantean retos significativos. Si bien podrían mejorar la movilidad vehicular y ofrecer espacios recreativos, su enfoque actual corre el riesgo de perpetuar las desigualdades en movilidad y calidad de vida. Integrar una visión inclusiva que priorice a los peatones y fomente la movilidad sostenible es esencial para construir una ciudad más equitativa y segura.