Hoy, Plan Estratégico de Juárez presentó el Informe Ciudadano 2021 en donde se exponen datos sobre los servicios públicos, índices de desempeño de regidores, de planeación municipal, de gobierno abierto y una evaluación de riesgos de corrupción, todo del Gobierno Municipal de Juárez 2018-2021.
En primer lugar, Érika Donjuan Callejo, coordinadora del Sistema de Indicadores de Calidad de Vida Así Estamos Juárez, informó sobre la percepción ciudadana sobre el estado de los servicios y espacios públicos. Las bibliotecas fueron las mejor calificadas, mientras que las calles y pavimentación fueron el servicio peor calificado.
Destacó que el servicio de recolección de basura se encuentra en una tendencia a la baja desde 2016, de la que no se ha recuperado; que el alumbrado público presentó una mejora para 2020; que de manera general los servicios públicos fueron peor percibidos por las y los juarenses, mientras que los espacios públicos fueron mejor percibidos en 2020, en comparación con 2019.
En cuanto al Índice de Planeación Democrática, en que se evalúa la conformación y ejecución del Plan Municipal de Desarrollo, precisó que de manera general la evaluación fue de 0.52 (1 significa un buen ejercicio de planeación democrática).
Por otra parte, en el Índice de Gobierno Abierto, que evalúa la transparencia y la apertura a la participación ciudadana, el Gobierno Municipal obtuvo una valoración de 0.47 (donde 1 significa un gobierno abierto). La dependencia con mayor apertura fue la Dirección de Educación, con 0.72, mientras que el Instituto Municipal del Deporte y la Cultura Física de Juárez fue el menos abierto, con 0.37.
Posteriormente, Abelamar Chacón habló sobre el desempeño de las regidoras y los regidores de la administración 2018-2021. Resaltó que quienes mostraron un mejor desempeño ( con base en su asistencia a sus obligaciones, participaciones en Cabildo, atención a su correo electrónico oficial y proyectos de acuerdo propuestas vinculados a la Agenda Juárez 2030) fueron las regidoras Laura Yanely Rodríguez Mireles (PVEM) y Amparo Beltran Ceballos (PAN), seguidas del regidor José Solís (antes “Independiente”, ahora PT).
Por el contrario, quienes tuvieron el peor desempeño fueron la regidora Olivia Bonilla Soto (Morena), José Ávila Cuc, quien se retiró y dejó en el cargo a Alberto Guzmán (“Independiente”) y René Carrasco Rojo (“Independiente”).
Las comisiones temáticas de regidoras mostraron una tendencia similar, pues las que mejor se desempeñaron fueron las coordinadas por las regidoras Rodríguez Mireles y Beltrán Ceballos, mientras que las peor evaluadas fueron Obras Públicas y Planeación del Desarrollo Municipal.
Chacón denunció las obstrucciones a la participación ciudadana por parte del Ayuntamiento de Juárez, consistentes en el manejo de los tiempos de convocatoria y la arbitrariedad para decidir aplicar o no la Ley de Participación Ciudadana del Estado de Chihuahua.
Chacón señaló también que actualmente el personal jubilado y pensionado abarca el 10 por ciento del presupuesto municipal anual.
Asimismo, abordó la inversión en bienes y servicios y en obra pública de 2021, y el ‘plan B’ de “Juárez Iluminado” (plan emergente tras la retirada de la administración de Cabada del proyecto original, tras la exigencia ciudadana).
Enseguida, se habló del Riesgo de Corrupción en las adquisiciones y contrataciones de obra pública del Gobierno Municipal y destacó que de los supuestos 410 millones de pesos contratados por concurso público, la cantidad real ascendía solo a 170 millones, pues el resto se trataba de adjudicaciones directas disfrazadas de licitaciones públicas.
Además, de cada 100 millones de pesos contratados en obra pública en 2019 y 2020, 74 millones fueron contratados con alto riesgo de corrupción.
En conclusión, comentó Sergio Meza de Anda, director de la asociación civil, se obstaculizó la participación ciudadana, no hubo transparencia en los temas importantes de la administración pública, no se rindieron cuentas, se simuló apertura a la ciudadanía, persistieron los intereses personales por encima de los intereses públicos y hubo una corrupción generalizada.
Todo esto, agregó, llevó a servicios públicos deficientes, a obras nuevas “de mazapán” dada su mala ejecución, y al fracaso de “Juárez Iluminado”.
Finalmente, Meza de Anda sentenció que la administración de Armando Cabada, de 2016 a 2021, fue un gobierno cerrado, corrupto e ineficiente; un lustro perdido.