Ciudad Juárez, Chihuahua.– El 27 de noviembre el Cabildo de Juárez aprobó una modificación al Reglamento de Vialidad y Tránsito para el Municipio de Juárez que impone multas de 4 mil 300 pesos a las personas que se metan a las filas de cruce hacia El Paso. Aunque la medida pareciera un intento por fortalecer la seguridad y resolver parte del desorden vial que generan este tipo de acciones de las y los conductores, en la práctica vale la pena recordar que mientras las leyes no se apliquen, poco o nada harán para cambiar las malas prácticas.
El desorden vial en Ciudad Juárez es un problema que persiste a pesar de la implementación de nuevas medidas, como las sanciones por invadir carriles exclusivos del BRT y las filas en los cruces internacionales. Si bien estas multas son correctivas, no abordan las causas profundas del tráfico caótico, como la falta de infraestructura adecuada y la inconsistencia en la aplicación de las normas. La solución a largo plazo no está en crear nuevas leyes, sino en mejorar la aplicación efectiva de las existentes y en revisar los problemas estructurales de movilidad que afectan a la ciudad.
Seguridad vial: multas con efecto inmediato, pero no duradero
Ya hemos hablado aquí en ocasiones anteriores sobre las distintas reglas de tránsito que no se aplican como dice la ley, como los temas de las micas oscuras en las placas, el uso de todoterrenos, autosardinas y la retención de documentos. Todas estas cuestiones están reflejadas en una ley que no se aplica de manera consistente. Considerando esto, ¿qué le podría dar la certeza a las personas de que no pasará lo mismo con las multas a las filas de los puentes o a la invasión de los carriles del BRT?
La reciente imposición de multas a quienes invaden las filas de los cruces internacionales, puede tener un efecto inmediato, pero no garantiza un cambio duradero. En lugar de enfocarse únicamente en aplicar sanciones, se necesita un enfoque más amplio que contemple la mejora de la infraestructura vial, la educación y concientización ciudadana, y (en el caso del uso de los carriles confinados del JuárezBus en la línea 1) una coordinación más eficaz entre estado y municipio.
El ejemplo del BRT-1, donde la falta de información clara y la ausencia de una fecha oficial de arranque han dejado carriles exclusivos bajo uso inadecuado, ilustra cómo las políticas públicas no pueden ser efectivas si no se implementan de manera coordinada y bien planificada. Las autoridades deben dejar de recurrir solo a nuevas leyes como solución y enfocarse en la aplicación efectiva de las que ya existen, garantizando una movilidad más ordenada y eficiente para las y los juarenses.
En conclusión, la existencia de leyes puede tener un efecto rápido; sin embargo, la existencia de leyes no va a resolver los problemas de movilidad y seguridad vial mientras no se aplique de manera estricta. Cualquier cosa por debajo de ese requisito es, en el mejor de los casos, solo un remedio temporal.